Verbos

Estoy enojada, estoy indignada y tengo 19 años. Nada mejor para aprovechar y actuar. Me vivo quejando de todo (y no con mala onda, sino con una sonrisa pero aún así diciendo que esto está mal), pero tengo que hacer también. Así como hace más de un año conocí este hermoso pero triste lugar llamado Hospital Dr. José T. Borda, primero desde la acción lejana y después puertas adentro, ahora necesito algo más, quiero hacer todo el tiempo, quiero cambiar las cosas o no, pero intentarlo. El vacío del "no hacer" no tiene que vivir nunca más en mi. Cuando se ven los cambios, no se puede parar. Por eso, gracias a este hospital, gracias al Borda, me dio la esperanza que los adultos (la mayoría) y los medios te quitan todos los días. Me abrió las puertas a mi verdadero mundo. Entendí que los internos son mis amigos y los locos están afuera preguntándome para qué hago tal cosa si no va a cambiar nada y la verdad es que mientras existan aquellos que tengan ideas pero no las cumplan, no, no voy a poder cambiar nada, entonces hagamos, hagamos porque somos el 99% (como dice Ska-P) y lo establecido no es siempre lo correcto, siempre ganan unos pocos y cada noche, antes de irnos a dormir resignados, nos decimos que las cosas son así y no pueden cambiar ¿Pero realmente no pueden cambiar? ¿Realmente el poder de unos pocos beneficiados es mayor que el de millones de personas sufriendo? La loca soy yo cuando desconfío de todo, cuando me quejo, cuando busco alternativas, pero no ellos que todos los días van a trabajar y vuelven a casa frustrados, pero con un lindo auto, por lo menos ¿Yo soy extremista? Extremista por preferir una ensalada bien rica a un pedazo de animal el cual fue maltratado y asesinado para que vos lo disfrutes mientras amas a tu perrito. Extremista por no querer vivir en un mundo donde es tan fácil que te saquen todo (la privacidad, los derechos, la vida), por no querer votar a quién mañana me va a meter la mano en los bolsillos o me va a mandar a matar en una manifestación, por no querer una democracia indirecta, tan indirecta que nuestro único derecho es votar. Extremista por no conformarme. Obvio que soy extremista entonces, porque el color gris nunca cambió nada y gracias a que los extremistas se unieron hoy no vivimos bajo el autoritarismo y podemos quejarnos un poco más. En fin...

No hay recompensa sin lucha, a luchar!